Home > Blog de noticias > Artículos de opinion > Arte: creatividad e inteligencia emocional

Este artículo quiere hacer ver cómo el arte crea capacidades como la creatividad y la inteligencia emocional que son tan claves para la vida en sociedad. Para esto primero debemos entender qué es la creatividad y la inteligencia emocional y cómo estas capacidades aportan a la sociedad. Y luego, entender el rol que cumple el arte en la creación y refuerzo de estas capacidades.

La creatividad es una capacidad para generar procesos y/o productos como ideas, representaciones o artículos, que cumplen con las características de ser originales y apropiados (Plucker, Beghetto y Dow, 2004). A pesar de que al hablar de creatividad solemos pensar en los artistas, esta no es la única forma en que la creatividad se manifiesta. La creatividad está también en la solución de problemas en nuestra individualidad, nuestra cotidianidad y nuestro entorno profesional. Constantemente debemos tomar decisiones y día a día nos enfrentamos a situaciones problemáticas. Cuando lo hacemos tenemos que decidir siempre (consciente o inconscientemente) si los abordamos de una manera convencional o de una manera creativa y si los beneficios de ser creativo son mayores que los riesgos asociados a ello. Por ejemplo, cuando tenemos visita en casa y vamos a preparar una cena. Debemos decidir si irnos por lo convencional, que sabes que estará bien porque es lo que sabes preparar o arriesgarte a cocinar un plato nuevo para dejar a tus invitados pasmados, pero asumiendo el riesgo de no haberlo hecho antes y no estar seguro de si todo saldrá como esperas.

Y es precisamente aquí y durante todo el proceso creativo donde entra la inteligencia emocional, pues la creación y solución de problemas implica indiscutiblemente las emociones; el miedo a no lograr solucionar el problema, la emoción de iniciar, la frustración cuando uno se estanca, la felicidad de haber obtenido un buen resultado o la tristeza cuando no. Las emociones benefician o perjudican el proceso creativo, de hecho, aunque no seamos realmente conscientes de ello, las emociones influyen directamente en todas nuestras decisiones y nuestra vida y la inteligencia emocional es la habilidad de ser consciente de las emociones propias, entenderlas y aprovecharlas en las situaciones que enfrentemos.

Volviendo al ejemplo que propuse, puede ocurrir que decidiste ser creativo y cocinar algo que nunca habías hecho. Fuiste al mercado, compraste lo que necesitabas y volviste a tu casa pero al iniciar la preparación te das cuenta que dejaste un ingrediente importante en el supermercado y que ya no tienes suficiente tiempo como para volver a salir y un domicilio se demoraría mucho o sería más costoso. La inteligencia emocional permite aceptar la frustración del momento y las consecuencias de haber cometido ese error, elijes pedir pizza a domicilio o cocinar algo fácil para lo que tengas todos los ingredientes; y la creatividad permite buscar diferentes soluciones al problema, tal vez improvisar un poco en la cocina y crear un plato totalmente diferente al de la receta, pero igual delicioso y aún así sorprender a tus invitados.

Nuestro mundo está en constante cambio y la mayoría de la gente trabaja en proyectos con restricciones temporales, y de recursos. Por tanto, se necesita una gran habilidad para: (1) gestionar la ansiedad que los plazos de entrega y los obstáculos pueden producir, y (2) conceder el tiempo necesario a la búsqueda de problemas y a la exploración de ideas que puede verse obstaculizada por la falta de recursos.

Aquí quiero resaltar que “las emociones son vitales para todas las disciplinas artísticas, desde la pintura hasta la escultura, la música, el cine, el teatro y demás artes.” (Ivcevic, Hoffmann, Brackett, & Botín, 2014, p. 14). Y aunque para algunos artistas, manejar la emocionalidad es un proceso inconsciente y lo perciben como algo automático o natural, estas habilidades de inteligencia emocional se pueden enseñar, practicar y desarrollar por medio del arte (Brackett, Rivers, Reyes y Salovey, 2012; Rivers y Brackett, 2011). Todo contacto con el arte, su apreciación, o su creación, puede ser una poderosa herramienta de enseñanza para mejorar las habilidades de inteligencia emocional y la creatividad en nuestra vida cotidiana y profesional. ¿Por qué no empezar a educar a nuestros niños en arte y crearles capacidades que de facto les van a ser útiles en el transcurso de su vida? ¿Por qué no fomentar el arte para crear una sociedad más humana, con nuevas ideas y oportunidades de ser mejores?

El Encuentro Intercolegiado de Danzas Tradicionales Delia Zapata Olivella es un proyecto que anualmente se propone: suscitar el estudio de la tradición popular Colombiana basado en las diversas danzas tradicionales, busca la capacitación y actualización de los maestros y artistas formadores a través de talleres interdisciplinarios, acompaña a nivel pedagógico y artístico a cada uno de los grupos participantes en el proceso de producción de una obra hasta su puesta en escena y pretende estimular los procesos creativos y mejorar la calidad de las expresiones artísticas en las diferentes puestas en escena del género tradicional.

Esto representa una oportunidad inmensamente grande para que nuestros niños y jóvenes se enamoren cada vez más del arte y creen capacidades realmente útiles para la vida. Participar en un evento como este desde edades tempranas puede despertar en ellos interés y curiosidad por el arte y abrir su mente a nuevas ideas y nuevos pensamientos. Además, aunque hacer arte parece fácil, es un proceso que implica tiempo y dedicación. Por tanto, potencia la creatividad, la inteligencia emocional y enseña también la importancia del esfuerzo, la constancia y la perseverancia.

TATIANA GUTIÉRREZ SÁNCHEZ

Referencias

Ivcevic, Z., Hoffmann, J., Brackett, M., & Botín, F. (2014). Artes, emociones y creatividad. Artes y Emociones que potencian la creatividad, 9-23.

Plucker, J. A., Beghetto, R. A. y Dow, G. T. (2004). «Why isn’t creativity more important to educational psychologists? Potentials, pitfalls, and future directions in creativity research». Educational Psychologist, 39, pp. 83-96. DOI: 10.1207/s15326985ep3902_1.

Brackett, M. A., Rivers, S. E., Reyes, M. R. y Salovey, P. (2012). «Enhancing academic performance and social and emotional competence with the RULER feeling words curriculum». Learning and Individual Differences, 22, pp. 218-224. DOI: 10.1016/j.lindif.2010.10.002.

Rivers, S. E. y Brackett, M. A. (2011). «Achieving standards in the English language arts (and more) using The RULER Approach to social and emotional learning». Reading & Writing Quarterly, 27, pp. 75-100. DOI: 10.1080/10573569.2011.532715.